La producción de carne porcina creció 8,7% los primeros ocho meses de 2016 con respecto al mismo período de 2015, mientras que el consumo trepó hasta el récord de los 12,3 kilogramos por persona, lo que significó un aumento del 10,5% interanual, según un estudio realizado por la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES) retomado por Supercampo.
"La expansión del sector obedece a la inercia positiva que generó el fuerte proceso de inversiones en los últimos cinco años que, según estimaciones, llegaron a los u$s 1.000 millones, que permitieron abrir nuevos frigoríficos en los dos últimos años, por lo que se amplió la capacidad productiva en el país", explicó la consultora.
Según los datos que arrojó IES, en los primeros ocho meses del año la producción alcanzó las 340.000 toneladas, un 8,7% más que a igual período en 2015, mientras que la faena creció un 9,8%, con 3,9 millones de cabezas trabajadas.
Esto generó un gran aumento en la oferta de carne porcina, lo que contuvo los precios internos y provocó la sustitución de la carne vacuna y aviar por la de cerdo.
De la misma manera, el consumo aparente tuvo una expansión del 10,5% con 353.000 toneladas, lo que representó un consumo per cápita récord de 12,3 kilogramos por habitante, un 11% más que el acumulado de enero a agosto del año pasado.
El incremento en la producción fue acompañado por un aumento del 95,1% en las importaciones en cantidades y un 65,3% en valores entre enero y agosto de este año. Las compras totalizaron los u$s 40,1 millones y 13.900 toneladas de carne.
Las importaciones en cantidades provinieron principalmente de Brasil (92,5%), Dinamarca (6%) y España (1,4%), mientras que las exportaciones fueron "marginales", ya que la producción local "apenas alcanza para abastecer el mercado interno y no restan excedentes para la exportación", consignó la consultora.
En cuanto a las perspectivas productivas del sector para el año que viene el director de IES Consultores, Alejandro Ovando, consideró que "presentan un escenario positivo en el cual se alcanzarán nuevos récords de producción, debido a las inversiones en el sector, y nuevos récords en el consumo interno, gracias al encarecimiento de otras carnes que derivará en un mayor consumo de carne porcina".