Los márgenes económicos en granjas de producción intensiva de cerdos de distintas escalas y regiones del país, se deterioraron sensiblemente en lo que va de 2018, luego de haber transitado un 2107 positivo. Así lo revela un informe elaborado por Ieral Fundación Mediterránea que monitorea esta situación, haciendo distinción entre niveles de eficiencia, escala y ubicación.
Según el informe, "los costos se han movido mucho más rápido que los ingresos", lo que generó este cambio tan brusco de tendencia. Por caso, los primeros subieron más del 60 por ciento en el período junio 2017-junio 2018, mientras que los segundos sólo el 21 por ciento.
En junio 2018 la granja de 250 madres y eficiencia baja que se usa de referencia muestra un margen neto (ingresos descontados todos los costos) de -$6,8 por kilo producido si se considera la localización sur de Córdoba (Malena) y de -$8,3 si el emplazamiento es Rosario. Incluso sin imputar amortizaciones, esta tipología de granjas pierde recursos (-$ 2,1/kilo y – $ 3,6/kilo, respectivamente).
Ieral también señala que los establecimientos de mayor escala y eficiencia, y alejados de la zona Rosario, mantuvieron sus márgenes en terreno positivo hasta mayo, pero ya no así en junio. La granja de 500 madres y alta eficiencia ubicada en Malena tuvo margen de $0,0 por kilo en junio de 2018 ( $3,2 si no se descuentan amortizaciones). Y la misma tipología de granja pero emplazada en Rosario perdió dinero, con un margen neto de -$1,3 por kilo producido ( $1,9 si no repone capital depreciado).
"La crisis actual estaría siendo ya más profunda que la del 2016", asegura el relevamiento y detalla que en el primer semestre de ese año la granja de menor escala y baja productividad del sur de Córdoba acumuló 5 meses consecutivos de márgenes negativos, una cantidad de meses similar a la que ya lleva este año. En junio de 2016, el margen neto, medido a precios de hoy, era de -$5,3 por kilo, una pérdida un 20 por ciento menor a la que muestra junio de este año ($-6,8 por kilo). En el caso de la granja de mayor escala y alta productividad, en 2016 el margen neto era levemente positivo ($0,9), mientras que este año se ubica en $0.
Por otra parte, apunta que un elemento que agrava el escenario, y que no está contemplado en los cálculos anteriores, es la reducción de la alícuota de IVA del 21 por ciento al 10,5 por ciento en la venta de productos vinculados a la cadena (capón, cortes de carne), efectivizada en el mes de febrero de 2018, que está generando importantes saldos a favor del productor (adelantos de impuestos).
En junio de 2018 los 16 casos que se monitorean (diferentes granjas, localizaciones, formas de aprovisionamiento del alimento) se encuentran con saldos negativos de IVA (a favor del productor) en su operatoria habitual, con valores que van desde -$0,12 por kilo producido en la situación más favorable (granja de 500 madres y eficiencia alta que dispone del maíz y elabora expeller de soja a fasón y se encuentra alejada del puerto) y hasta los -$1,96 por kilo en el caso más desfavorable (granja de 250 madres y eficiencia baja radicada en Rosario que adquiere maíz y expeller de soja en el mercado).
Fuente: La Capital