La zona de confort térmico, es en la cual el lechón despertará todo su potencial genético para expresar al máximo los mejores resultados. Las formas y medios disponibles por los cuales conseguimos el confort térmico óptimo dentro del galpón varían de país en país: se usan por ejemplo las criadoras manuales o de encendido automático, los turbos calentadores de combustión directa o indirecta, los tapetes térmicos y/o las lámparas infrarrojas.
La forma de calentar puede variar, pero el objetivo es el mismo: el bienestar animal gracias a un buen trabajo del encargado y del buen funcionamiento de la calefacción, siempre controlando el consumo de energía.
Sin embargo, ¿quién o qué nos puede garantizar que logramos conseguir la zona de confort térmico todos los días del año en la granja? Hoy en día hay tantas casetas y tanto trabajo que hacer en granja, que nos es imposible saberlo al 100% todos los días del año. Y esto es un gran problema: la falta de información o, peor, los datos incorrectos o atrasados que recibimos a diario.
¡Si no se mide los detalles durante la parvada, no podremos darnos cuenta de los problemas ni tampoco solucionarlos!
La clave está en la medición de los datos para que los encargados, médicos y/o directores de empresas tomen las buenas decisiones en tiempo real. Claramente, un dato relevante que debemos monitorear es la temperatura y en general el estrés térmico de los animales sobre todo durante la maternidad o el destete. Hoy, existen controladores conectados en tiempo real a la nave con los sensores de temperatura que mandan alarmas y reportes (gráficos, html o excel) directamente a las empresas para que estén atentos a una temperatura muy baja o alta.
Por cierto, es complicado analizar curvas de temperatura sin saber si los equipos de calefacción funcionaron o no correctamente, por lo tanto, es muy importante monitorearlos para tener una idea exacta de lo que está sucediendo sin estar físicamente allí. ¿Para qué me sirve saber que anoche la temperatura cayó dentro del galpón a 20 grados (en una maternidad) si no me avisan que sucedió realmente? ¿Algunos equipos fallaron? ¿Algunos se apagaron a una cierta hora? ¿O de pronto, varias nunca prendieron?
Los solenoides de estos equipos pueden hablar por sí mismos, enviando reportes útiles en caso de falla, lo cual ayuda muchísimo a los encargados de mantenimiento en identificar los equipos defectuosos y al final a corregir el problema directamente para que no vuelva a caer la temperatura la siguiente noche.
De esto se trata: simplificarnos la vida monitoreando por ejemplo, el confort térmico de sus animales remotamente gracias a la tecnología Maximus.
En vez de revisar cada día/noche los sensores o termostatos manuales dentro de las granjas, piensen en optimizar su tiempo, recibiendo desde un mismo controlador las alarmas y los reportes diarios para enterarse de eventuales problemas directamente desde su oficina o su casa vía su celular, tableta o computadora.
Además, despreocúpense de revisar de forma manual sus consumos de gas o de corriente eléctrica a diario para entregar reportes…El controlador Maximus lo puede realizar por ustedes, vía sus medidores de gas o sensores de corriente eléctrica conectados: ¿Quién no quiere saber cuántos mililitros o galones de gas se consume por nave en tiempo real? ¿Quién no quiere saber por qué tal caseta consume más KW que las otras?
Autor: Mathieu Le Henaff
Director General Maxico AG