Una demanda sostenida que sigue convalidando mejores precios al final de la cadena, ayuda a los productores de cerdos a sobrellevar el impacto negativo del aumento en el costo de los cereales.
El abrupto despegue de los precios de la carne vacuna en el mostrador, permitiría en el corto plazo tocar un poco hacia arriba los precios de la carne porcina, cuya demanda interna no ha sido atendida en su totalidad por la producción nacional. En el mes de noviembre se importaron 1.099 tn. por un valor de u$d 3.104.010.
Los productores de cerdos estaban expectantes a comienzos de esta semana, dice el diario Los Andes, aguardando las decisiones concretas del nuevo Gobierno nacional en materia de retenciones a las exportaciones de granos. Es que eliminar o disminuir esos gravámenes (según los casos) y las trabas para colocar la producción granaria fuera del país, alentaría los negocios con el exterior y, probablemente, caería el volumen de oferta en el mercado interno.
La cuestión es si, en esa eventualidad, los precios subirán por encima de los niveles ya alcanzados. Juan Luis Uccelli, el titular de la Asociación Argentina de Productores de Porcinos, emitió un comunicado tranquilizador en el boletín de la entidad, pidiendo paciencia a los productores: "Subió el maíz, la harina, el novillo, la carne y todo lo que uno se imagina y el precio del cerdo parece "quedado", pero también recorrerá dicho camino y las adecuaciones llegarán. Subieron los costos pero a nadie ahorcaron. El negocio seguirá por el buen rumbo, como en los años que pasamos y es un error la desesperación de algunos por una o dos semanas cuando hay que ver lo sucedido en un año. Es una oportunidad fantástica para el sector la situación de las carnes complementarias y sería un error no aprovecharlo por pasarse de revoluciones. La idea es ganar siempre, no mucho en un momento y nada en otro. Sepamos que somos parte de la adecuación del mercado en el que nos encontramos, en el cual la mayoría de las variables no las manejamos".
Mercado sostenido y una producción en aumento
De cualquier manera, la demanda de carne de cerdo no retrocede y la oferta, aunque sigue creciendo, no alcanza para satisfacerla. En este escenario, en el que con un aumento de casi 40% en el precio del novillo en pie y con una oferta de carne porcina que es absorbida en su totalidad por el mercado interno, también el precio del cerdo está sostenido.
La proyección de la Asociación Argentina de Productores de Porcinos, según la cual “el precio del cerdo en pie, a fin de año, llegaría a los $18 o $18,50”.
Mientras tanto, la producción ha continuado en aumento. La mayor actividad en el orden nacional, se presume, es debido a que los productores de cereales de la región pampeana encuentran que una forma de agregarle valor a sus granos, sin las complicaciones que tienen para exportar, es produciendo carne de cerdo”. Por eso, se han hecho varios criaderos con un esquema de fondos de inversión, que están en condiciones de asumir una inversión inicial de 8.000 o 9.000 dólares (a la cotización oficial de comienzos de esta semana) por madre instalada, para armar granjas con tecnología de última generación.