Para APROPORBA, entidad adherida al área de producciones intensivas de la Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (FEBA), la activación de variables relevantes, tales como la quita de retenciones, el ajuste del tipo de cambio, la liberación de las importaciones con la consecuente baja del precio del capón y un aumento general en los costos, ha generado una situación muy difícil de asimilar, que complica la permanencia de esos productores en el negocio porcino.
Buenos Aires tiene aproximadamente 40.000 pequeños y medianos productores porcinos, cifra que representa el 90% del total de productores de la provincia. Esa cifra, sumada a la mano de obra asociada, lleva a 400.000 el número de personas que ven afectada su fuente de ingresos.
La situación se hace aún peor debido a la importación de carne porcina de países cuyos rodeos porcinos están expuestos a enfermedades de las que nuestro país está libre hasta el momento, y también en razón de un aumento del orden del 200% en el precio del cereal, que representa el 70% del costo del capón.
El cuadro define claramente una marcada ausencia de rentabilidad.
A manera de propuesta, desde APROPORBA entendemos fundamental para superar lo descripto y estructurar un trabajo conjunto:
(a) establecer un sistema que permita rebajar los costos de alimentación derivados del excesivo aumento del precio del cereal;
(b) controlar tanto la cantidad como el estado sanitario de la importación del sector, y
(c) constituir una mesa porcina provincial interdisciplinaria, en la que el Estado, las instituciones y los productores puedan discutir la articulación de una política común para la actividad porcina.
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