La medida de fuerza se decidió porque el presupuesto 2017 para el Servicio Nacional de Sanidad Animal y Calidad Agroalimentaria bajó significativamente respecto del actual.
Además del paro, la medida incluye una radio abierta en la Plaza de los Dos Congresos para convocar a los diputados nacionales a debatir el presupuesto 2017, se distribuirán folletos explicativos y banners para explicar la función fundamental que cumple el organismo para garantizar la salud pública de la población y el comercio exterior agropecuario.
"Es imposible que el Senasa recaude más de 6 mil millones (y que sólo se haya previsto un poco más de la mitad de presupuesto anual) si no garantiza la sanidad y calidad de los productos y animales exportables, en un modelo que el gobierno impulsa. Lluvia de inversiones y desfinanciamiento del organismo que garantiza sanidad y calidad no pueden ir de la mano", afirmó el sindicato.
Un comunicado afirmó que "con asombro e indignación se leyeron los números del presupuesto 2017 para el Senasa. Es de apenas 3.746 millones de pesos en gastos, más un recurso de 6.192 millones (en la proyección de la recaudación propia en tasas, aranceles y el porcentaje de las importaciones). Es una restricción de $ 2.446 millones para financiar el déficit del Tesoro".
Los dirigentes aseguraron que el presupuesto del organismo fue reducido en términos reales, al igual que las partidas para el funcionamiento operativo respecto de 2016, incluso de forma nominal, por lo que el Senasa "estará paralizado totalmente".
"El organismo se financió históricamente con recaudación propia y aportes del Tesoro. En 2017, no solo no aportará más nada sino que se apropiará de gran parte de la recaudación derivada de tasas, aranceles y el comercio exterior, que el organismo debe controlar y que es una recaudación específicamente destinada a él", afirmó.
Los sindicalistas señalaron que, de esa manera, será imposible resolver "la extrema precariedad laboral" existente. También adelantaron que "la seguridad fitozoosanitaria estará en grave peligro, en especial a partir del resurgimiento de la aftosa y el HLB, que significará el fin de las exportaciones".
"Es preciso proteger a la población y la capacidad exportadora de esos flagelos. Por lo mismo, se trata de una lucha ejemplar y contundente de los 6.800 trabajadores del Senasa, porque está en juego la salud de todos y la situación laboral", concluyeron.
Los trabajadores exigen un aumento del presupuesto, el pase de los contratados (monotributistas), la efectivización de los concursos 2014, el cese de la automatización y el rechazo a la derogación del decreto 4.238 que legisla la actividad del Senasa y de la privatización de funciones indelegables del Estado.
Ante la ausencia de control sanitario, en especial en las fronteras, el presidente del organismo público, Luis Dillon, señaló a Télam la "disconformidad" oficial con la medida de fuerza gremial y aseguró que luego de evaluar la situación, las autoridades difundirán un comunicado en los próximos días.
"Por ahora no opinaremos. Observaremos los acontecimientos y, luego de evaluar la situación, el Senasa difundirá un documento público. Pero obviamente estamos en total desacuerdo con la medida de fuerza decidida por la ATE. En ese sentido, hoy enviamos una nota al gremio expresando esa disconformidad total", precisó el funcionario esta noche en declaraciones a esta agencia.