Norberto tiene 68 años y le escribió una emotiva carta al presidente, en la cual detalles que es un “sobreviviente” del campo y que ve cómo sus colegas de a poco van dejando la actividad.
Hace más de 25 años que se dedica a la actividad porcina, pero por más optimismo y esfuerzo que le dedica a su trabajo diario, se considera un “sobreviviente” del sector que ve cómo sus colegas de a poco van dejando la actividad.
Es por esa razón que decidió escribirle una carta a Mauricio Macri, presidente de la Nación Argentina, para explicarle que “lo que más me preocupa es el futuro, y acá sí le voy hablar pensando en esa personita que me lleva de la mano hacia los corrales para que le acerque un cerdito así lo puede acariciar”.
Compartimos la carta completa de Norberto:
Recreo, provincia de Santa Fe
Sr. Presidente de la Nación Ing. Mauricio Macri
Disculpe el atrevimiento, ante nada me presento, mi nombre es Norberto Pereyra soy un pequeño productor porcino de la localidad de Recreo, Prov. de Santa Fe; tengo 68 años de edad y mi familia consta de mi mujer, mi hija y un hermoso nieto.
Sobre esta última persona y mi actividad de trabajo que elegí o mejor dicho la vida me llevó a elegirla y quererla quería explayarme en esta carta hacia su persona.
Voy a empezar comentándole que mi familia y yo vivimos de la producción porcina hace ya más de 25 años, en todo este tiempo hemos enfrentado grandes vaivenes a los que nos hemos tenido que ir adaptando, sobre todo los económicos, porque el resto de las cuestiones, le damos gracias a Dios, salud y trabajo, nunca faltaron.
A esta altura de mi vida ya nada me sorprende; el cascarón que supimos construir por los golpes de la vida hoy nos permite ser unos buenos sobrevivientes; además usted se debe imaginar que a mi edad cambiar el rumbo y vivir de otra cosa se complica un poco. Pero lo que más me preocupa es el futuro, y acá sí le voy hablar pensando en esa personita que me lleva de la mano hacia los corrales para que le acerque un cerdito así lo puede acariciar.
Si usted me permite de mi experiencia de trabajador rural, para aportar mi granito de arena para el país y el futuro de país para mi nieto, le aconsejo, qué bien le haría al país tener una política de desarrollo del campo pero con productores, no con empresarios oportunistas.
Con toda honestidad le digo que me entristece ver cómo año a año, cada vez más, esta producción está quedando para pocos, por eso cuando hablo de sobreviviente es cómo me siento, viendo cómo mis colegas de a poco van dejando la actividad y el mayor drama que veo es que sus hijos y/o nietos van hacia otros proyectos que nada tienen que ver con lo que hacemos, incluso están en cosas que ni siquiera se relacionan con el campo.
Sigo visitando amigos y a sus hijos que hoy, encerrados en sus casas en la ciudad, añoran los años en los que podían vivir en el campo y del campo. De todas maneras Sr. Presidente le quiero aclarar que no soy ingenuo, sé que hoy no podemos vivir como antes con gallinas en el patio, algunas vaquitas y la huerta; pero sí hay personas que están todo el tiempo pensando cómo hacer la actividad más rentable y sobre todo que nos involucre a todos. Eso me llevó a participar y luego a comprometerme a trabajar duro en una joven asociación de productores porcinos de la provincia, me hace sentir muy bien porque me junto con mis pares, doy mis opiniones que son las que me dio la experiencia sobre todo, pero escucho y aprendo mucho, porque también hay gente joven con muy buenas ideas e ideales.
Sabemos lo que cuesta salir adelante y por un lado lo comprendo en su tarea, ya que muchas veces los problemas son culturales y nos va a llevar tiempo cambiarlas; pero Sr. Presidente usted ni se imagina cómo nos puede marcar verdaderamente el rumbo con algunas decisiones en el sector del que soy parte, yo le creo y lo acompaño cuando dice que hay que abrirse al mundo y que es lo mejor, pero debe entender que nosotros necesitamos mucho más acompañamiento del estado, necesitamos que nos ayuden a fortalecernos y a romper esa corteza que creamos que no nos permite confiar, estar siempre a la defensiva, ser individualistas, en pocas palabras, necesitamos decisiones políticas claras, para un sector que está a tiempo de ser inclusivo.
Lo escuché decir de pobreza cero y ser el supermercado del mundo, usted debería ver el motor humano y el potencial de este sector cómo puede generar oficios a mucha gente de forma directa en el campo y también cuántos recursos de mano de obra indirecta en las localidades, llámense transportistas, electricistas, plomeros, albañiles, veterinarios, etc., simplemente mostrándole el rumbo y dándoles los recursos para eso. Le pido y le sugiero que nos tenga muy pero muy en cuenta a la hora de pensar en el crecimiento y desarrollo del país; sabemos producir y pensar y sobre todas las cosas sabemos ser solidarios, y esto, sepa que es de suma importancia para todos. La actividad tiene un futuro enorme en el país, pero sin políticas de inclusión, el desarrollo lo van a hacer pocas personas y el resto lo miraremos de la tribuna, con todo lo que eso significa. El pequeño y mediano productor no tiene las suficientes herramientas para poder ser un verdadero empresario de la carne porcina, con el riesgo de fracasar en su negocio o peor aún, de producir en la marginalidad con todas las consecuencias que eso conlleva, por ejemplo para la salud humana entre otros tantos problemas.
Necesitamos que nos pueda atender y escuchar como productores, tenemos ideas de cómo afrontar las problemáticas que nos avecinan, pero sin decisiones políticas no lo podremos hacer.
Espero su pronta respuesta, desde ya muchas gracias. ¡Fuerza y sepa que estamos para sumar!.
Norberto Pereyra Productor Porcino
Por Facundo Mesquida – Nota publicada en el portal Infocampo