El Servicio de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) de Argentina reforzó las medidas sanitarias para prevenir el ingreso de esta enfermedad al país, ante la ocurrencia de peste porcina africana en China, la recirculación del virus en países de Europa del Este y su reciente reaparición en la zona fronteriza de Bélgica con Francia,
El Senasa aclaró que la enfermedad nunca fue detectada en Argentina. Se trata de una enfermedad de notificación obligatoria ya que provoca grandes pérdidas económicas a la producción porcina de los países infectados, aunque no afecta a las personas ni altera la inocuidad de la carne.
Desde el organismo argentino destacan que para mantener la sanidad de los porcinos es fundamental que todos los responsables de la cadena sostengan y refuercen su compromiso en la prevención y eventual contención de la enfermedad.
En este sentido, recomiendan mejorar las medidas de bioseguridad de las granjas, notificar de manera inmediata casos sospechosos y mortandades elevadas, no alimentar a los cerdos con desperdicios y restringir el ingreso de personas al predio, especialmente aquellas que hayan estado en países afectados.
Por otra parte, el Senasa advierte a quienes llegan a Argentina desde el exterior, no ingresar con carne de cerdo ni sus derivados sin autorización de ese organismo, no ingresar material reproductivo sin la certificación sanitaria correspondiente, y no tomar contacto con animales de granja en Argentina si estuvo con animales potencialmente infectados.
También recordaron la importancia de tener en cuenta que el virus puede ingresar a través de cerdos, semen, y productos porcinos destinados a consumo humano como carnes, fiambres y chacinados.
Ante la posibilidad de que los residuos comestibles de buques y aviones que llegan del exterior vehiculicen el virus, el Senasa reforzó los controles en los puestos de frontera para garantizar su correcta disposición y destrucción, evitando que los mismos sean consumidos por cerdos en Argentina.
La peste porcina africana se caracteriza por provocar fiebre alta, pérdida de apetito, hemorragias en piel y órganos internos, enrojecimiento de la piel de las orejas, abdomen y patas, diarreas y elevada mortandad en porcinos. (Noticias AgroPecuarias)
Por Gabriel Quaizel
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