A quienes viajen el próximo fin de semana largo, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) les recuerda adoptar precauciones al momento de comprar e ingerir productos porcinos y sus derivados para prevenir el contagio de la triquinosis.
Las personas se enferman de esta dolencia al consumir carne insuficientemente cocida o productos elaborados con carne de cerdo o de animales silvestres, principalmente jabalíes y pumas, que contienen en sus músculos larvas de parásitos del género Trichinella.
La faena doméstica y la carneada de cerdos en el campo –hábitos difundidos en la población rural y periurbana– promueven la distribución y comercialización de productos porcinos elaborados de forma casera o artesanal. Como en este proceso se utilizan carnes sin cocción, los chacinados, embutidos y salazones resultantes pueden contener larvas de los parásitos
que producen la enfermedad.
En consecuencia, quienes produzcan y elaboren estos productos deben verificar que la carne sea apta para consumo humano. Para ello, deben remitir una muestra de carne (músculo diafragmático –entraña–) de cada animal para que sea analizada en un laboratorio mediante la prueba de digestión artificial.
Para los consumidores, el Senasa recomienda que solo adquieran productos elaborados de porcinos y animales silvestres con la etiqueta que certifique su origen, si carecen de ella no es posible saber si han sido sometidos a la prueba diagnóstica.
En el mismo sentido, es importante comprar chacinados en establecimientos habilitados y no en lugares informales en los que no se puede demostrar la inocuidad y la trazabilidad del producto adquirido.
La prevención también debe trasladarse hasta los hogares: es importante cocinar correctamente la carne hasta que su interior pierda el color rosado, a fin de prevenir la transmisión de la enfermedad.
Además, debe tenerse en cuenta que la salazón, el ahumado y la cocción en microondas no matan al parásito que produce la triquinosis. Tampoco es segura la destrucción del parásito en frezzer común.
Una vez que ingresan al organismo de las personas, las larvas de Trichinella spp., pasan por el sistema digestivo y viajan por el sistema circulatorio hasta llegar a los músculos, donde se alojan.
Síntomas
Los principales síntomas de la triquinosis son: fiebre, diarrea, vómitos, hinchazón de párpados, fotofobia o decaimiento similar al de la gripe, dolores musculares y en casos severos, puede ocasionar la muerte.
Tomar conciencia sobre la importancia de prevenir la triquinosis permitirá modificar ciertas prácticas culturales en el consumo de alimentos, promover una alimentación responsable, evitar riesgos y consumir alimentos seguros.
En caso de presentar algunos de estos síntomas y haber consumido, recientemente, carne o subproductos derivados de cerdo o animales silvestres, debe concurrir rápidamente al centro de salud más cercano