Hace dos años se reunió por primera vez un grupo de interesados e interesadas para en la Municipalidad de Pellegrini, en lo que se denominó el primer Foro participativo de un nuevo Clúster Porcino ubicado en los partidos de esa región. Asistieron unas 40 personas, entre productores, elaboradores, técnicos de la actividad y decisores políticos de la producción local, y la finalidad principal era presentar una metodología participativa y un plan de trabajo para formular un Plan de Mejora Competitiva (PMC), para fortalecer la actividad en esa zona.
El cluster porcino del Oeste de Buenos Aires reúne a 122 pequeños productores en un área de casi 6 mil hectáreas, y cuenta con unas 38 mil cabezas en una región que integra a los partidos de Pellegrini, Salliqueló y Tres Lomas. Tiene dos frigoríficos y una planta de chacinados que producen unas 5000 toneladas, entre carne fresca y facturas. El área técnica descansa en el Senasa, el INTA; la Universidad Provincial del Sudoeste (UPSO), a las que se sumó también la Facultad Regional de Trenque Lauquen de la UTN.
También están integradas instituciones educativas entre las que están la Escuela Agropecuaria N°1 (Pellegrini), el Centro Educativo para la Producción Total (CEPT) N° 7 (Tres Lomas), la Escuela de Educación Técnica N° 1 (Tres Lomas), el Centro de Desarrollo Universitario Regional del Oeste (Ceduro, Tres Lomas) y varios centros de formación profesional.
Desde el sector privado participan la Sociedad Rural de Pellegrini, Asociación Rural Salliqueló, Sociedad Rural de Tres Lomas, Cámaras de Comercio de Salliqueló y Tres Lomas.
Hace una semana, el Inta publicó un trabajo donde realiza un balance de estos dos años de trabajo. Los objetivos primarios de esta experiencia de sinergia asociativa estuvieron en fomentar el intercambio de experiencias y buenas prácticas; mejorar la rentabilidad de los participantes; recibir información sobre nuevos productos ó avances tecnológicos; potenciar la entrada en nuevos mercados regionales; consolidar, difundir y promocionar el cluster; formar y profesionalizar el capital humano, y desarrollar proyectos de investigación conjuntos.
Como balance, desde el Inta se señala que la calidad del análisis y la participación de la mayor cantidad de actores involucrados en la cadena (productores primarios, secundarios, industria, faena, carniceros, logística y transporte) es la clave para tener una propuesta “competitiva” y ajustada a la realidad local, viable y que su implementación sea posible. En este sentido, el mayor desafío sigue siendo lograr la participación de los productores primarios y su involucramiento en los roles claves para definir propuestas y acciones.
Las lecciones aprendidas
Señala además el informe, que se pudo caracterizar a los distintos actores de la cadena para elaborar estrategias de trabajo con el sector en mediano plazo. Entre la información recopilada algunos de los datos más relevantes son:
-La mayor cantidad de madres está en manos de pequeños productores, con pocos animales y que no hacen el ciclo completo. Sin embargo, la cría es la etapa que requiere más tecnología para garantizar buenos índices productivos, y que más riesgo tiene de mortandad.
-De la producción de capones, sólo el 3% de la producción se vende localmente, el 97% restante se ubica en otros mercados (La Pampa, C.A.B.A.). En cambio el 100% de la producción de lechones se vende localmente. Cuando analizamos como obtienen el precio de su producto (capón) vemos que el 89% de los encuestados vende al precio que el comprador le ofrece, sin tener opciones de defender el ingreso por su calidad, costos de producción, etc.
Conclusiones
Se consideran interesantes las oportunidades de mercado analizadas, lo que permitiría
1. Proveer de volumen de capones a la industria regional
2. Proveer al consumidor argentino de chacinados secos de alta calidad.
3. Proveer al consumidor regional de fiambre cocido artesanal de calidad.
4. Abastecer a las carnicerías de la región con cortes de cerdo refrigerados
5. Proveer de volumen de capones a la industria regional.
Muy buen trabajo. Da cuenta de la capacidad de trabajo y de la asimilación de nuevos conceptos de manejo entre los cientos de pequeños productores de esta amplia zona de la provincia de Buenos Aires. El Inta es una oficina pública descentralizada y especializada en producción agropecuaria, y como tal hace su trabajo, vertiendo conceptos y estrategias nuevas para que el pequeño productor se instale, se arraigue y promueva actividad allí donde vive, haciéndolo con eficiencia y afán de desarrollo. Solo faltarían las políticas públicas que apuntalen a estos pequeños porcicultores y diseñen programas de incorporación de tecnología y mejora genética, a plazos extendidos y tasas de interés razonable.
Osvaldo iachetta
Editor de Todocerdos