Las cucarachas ingieren la materia orgánica a lo largo de seis meses. Cuando mueren, son trituradas y se convierten en pienso para animales.
“Pasamos seis años investigando el uso de cucarachas después de descubrir que pueden alimentarse de los desechos de la cocina y no crear contaminantes“, explicó Li Yanrong, gerente general de Qiaobin Agricultural Technology. Y agregó: “Hasta no hace mucho, eran los cerdos los destinatarios de buena parte de los residuos orgánicos, pero diversos brotes de peste porcina africana llevaron al Gobierno chino a prohibir esta práctica, lo que ha favorecido la creación de granjas de cucarachas en este y otros lugares del país, como la provincia occidental de Sichuan”.
Además de los piensos para el ganado, las cucarachas también son criadas con diferentes objetivos.
En la provincia de Sichuan, la compañía farmacéutica Gooddoctor cría en un entorno de oscuridad, calor y humedad, seis mil millones de cucarachas para emplearlas en la elaboración de productos medicinales y cosméticos.
”La esencia de la cucaracha es buena para curar las úlceras orales y pépticas, las heridas de la piel e incluso el cáncer de estómago”, sostuvo Wen Jianguo, gerente de la instalación de cucarachas de Gooddoctor. Sin embargo, indicaron que uno de los peores efectos nocivos que podrían tener estas grandes granjas de cucarachas podría ser una fuga de los mismos al exterior.
Zhu Chaodong, experto sobre la evolución de los insectos en la Academia de Ciencias china, advirtió de que un escape masivo de miles de millones de cucarachas en el entorno local sería una “catástrofe”. De todas formas, los productores aseguran haber dispuesto suficientes medidas de seguridad. “Tenemos un foso lleno de agua y peces. Si las cucarachas se escapan, caerán en el foso y los peces se las comerán a todas”, concluyó Wen Jianguo, gerente de la instalación de cría de cucarachas de Gooddoctor.