El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), luego de haber sido notificado ante la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) sobre la presencia del síndrome respiratorio reproductivo porcino (PRRS) en Uruguay, refuerza las medidas para evitar el ingreso de esta enfermedad -de notificación obligatoria-, que nunca fue detectada en la Argentina y que no afecta a las personas ni altera la calidad sanitaria de la carne porcina.
El virus se caracteriza por alteraciones en la reproducción en cerdas (abortos y nacimiento de animales muertos), y por problemas respiratorios en los lechones y cerdos de engorde.
La transmisión en porcinos se produce principalmente por contacto directo y en menor medida por heces, orina, semen o secreciones, insectos vectores (moscas y mosquitos) y por vía aerógena a distancias cortas. En las granjas, la enfermedad suele ingresar frecuentemente por introducción de animales nuevos y de semen.
En la Argentina, la vacunación contra PRRS está prohibida. Por lo tanto, la prevención se centra en la toma de medidas de control a fin de evitar el ingreso de la enfermedad, y en su detección temprana. Asimismo, el Senasa lleva adelante la vigilancia epidemiológica de las granjas porcinas mediante la toma de muestras de suero desde el año 2007 y el control de la totalidad de los animales importados.
Además de la medida de suspensión de productos porcinos, genética y cerdos vivos provenientes de Uruguay, el organismo sanitario argentino tomó otra serie de medidas, entre las que se encuentra una solicitud de mayor información técnica al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) del país vecino sobre su situación sanitaria actual respecto de PRRS y las medidas a aplicar.
Con el objetivo de poder identificar eventos sanitarios sospechosos, el Senasa junto al sector privado se encuentra diseñando una estrategia adecuada para reforzar las medidas de prevención (vigilancia epidemiológica, entre otras) y las medidas de bioseguridad de las granjas.
Por último, se recuerda a los productores porcinos la importancia de notificar de inmediato a la oficina del Senasa más cercana cualquier sospecha o presencia de eventos sanitarios con alta mortalidad, así como de fortalecer las medidas de bioseguridad en las granjas:
– No ingresar al país animales, semen ni productos porcinos sin la autorización del Senasa, porque se pone en riesgo el estatus sanitario nacional.
– No intercambiar animales ni semen de origen desconocido.
– Evitar el ingreso y el contacto con sus cerdos de personas ajenas a la granja, especialmente si también trabaja en granjas uruguayas.
– Limpiar y desinfectar los camiones y otros vehículos, ya que éstos y sus conductores son factores de alto riesgo de transmisión por estar en contacto con otros establecimientos o frigoríficos. Asimismo, el lugar de carga y descarga debe estar alejado del área donde se alojan los animales.
– Mantener actualizado un libro de registros de ingresos de visitas y vehículos.
– No intercambiar equipos, maquinarias y elementos con otros establecimientos porcinos.