En el INTA Pergamino, están comprometidos en potenciar el sistema, reafirmando la búsqueda de mayor bienestar animal. Para estructurar una cama profunda es necesario considerar diferentes factores, que se deben manejar como un todo. Desde INTA Pergamino se disponen a escuchar a los productores que quieren sumarse al sistema.
El elevado costo estructural de una granja porcina confinada es la limitación principal que tienen los pequeños y medianos productores del sector a la hora de diseñar un sistema de cría. Afortunadamente, el método de cama profunda es una salida concreta a la posibilidad de invertir en cerdos.
Se trata de una alternativa de bajo costo y de gran eficiencia, que es adoptada por muchas familias que se dedican a la producción porcina en el campo. Además, propicia el bienestar animal y el cuidado ambiental, entre otros beneficios.
“Es un sistema de menor inversión para los productores”, sostuvo la medica veterinaria María Suárez del Cerro, responsable del sector porcino del INTA Pergamino. La especialista, en diálogo con El ABC Rural, expresó que es “más sustentable desde el punto de vista ambiental que un sistema confinado”, debido a que no genera efluente liquidados.
“La cama profunda produce residuos sólidos que le brinda al productor la posibilidad de compostarlos o utilizarlos como abono”, mencionó. Sabido es que los efluente líquidos son mucho más contaminantes que los sólidos.
Un sistema novedoso
La producción de cerdos en cama profunda es un proceso muy original y cada vez más adoptado por los productores. Se realiza con materiales de muy bajo costo, en relación a los sistemas intensivos estabulados. Como cama se puede utilizar productos como paja de trigo, paja de avena, cáscara de arroz, entre otros.
Los corrales angostos funcionan mejor. Los más adecuados son porquerizas entre 12 – 14 metros de ancho, especialmente trabajando solamente con ventilación natural. En cuanto al largo, se utiliza desde 25 metros en adelante, satisfactoriamente sin considerar la dimensión un problema crítico.
La profundidad de la cama es crítica para obtener buenos resultados. Es importante empezar con 30 a 45 cm como mínimo. Todos los materiales de cama dan mejores resultados a mayor profundidad. Para obtener buenos resultados, es recomendable que la cama en el corral se mantenga lo más seca posible.
"Es un sistema mucho más amigable con el animal. Desde el punto de vista de su bienestar el cerdo puede expresar su comportamiento natural con este modelo de cría“, destacó Suárez del Cerro. En ese sentido, diagnosticó que este bienestar le permite al animal “mejorar los resultados productivos” y por consiguientes “el desenlace económico de la granja”.
“Más eficiencia de conversión”
La entrevistada, reconoció los beneficios de la cama profunda en eficiencia de conversión y ganancia diaria de peso de los cerdos. “La producción que se logra por animal se asemeja mucho a los sistemas confinado de las granjas de punta, pero a un costo mucho menor”, enfatizó la profesional de INTA.
Gracias a los rendimientos que posibilita, cada vez más productores apuestan a esta metodología de crianza. “Es normalmente adoptado por pequeños y medianos productores para lograr aumentar su eficiencia en la medida que van creciendo junto la actividad”, destacó.
Según la médica veterinaria María Suárez del Cerro, este modelo de cría incentiva el bienestar animal y como consecuencia los resultados productivos son contundentes.
Por otra parte, dijo que el cerdo tiene una gran necesidad de llevar a cabo su comportamiento exploratorio, cuya posibilidad es concreta en la cama profunda. “Pueden jugar entre ellos, osar, y sentirse en un habitad natural. Eso permite muy buenos resultados al sistema”, insistió la investigadora.
Ventajas desde la sanidad
Desde el punto de vista sanitario, el sistema de cama profunda también es recomendable. “Los cerdos tienen menos incidencia en tos y enfermedades respiratorias con este sistema de producción”, mencionó. Además, aseguró que el bienestar animal es fundamental para atender cuestiones sanitarias.
“Podemos ver a simple vista que los cerdos en cama profunda están confortables. Esta felicidad que ellos manifiestan produce que los problemas sanitarios sean menores”, aseguró la entrevistada.
Por último, como recomendación a los productores propulsores de este método, sostuvo que que deben llevar un registro diario del mismo. “Es fundamental tener registro de la alimentación que se entrega y del peso de los animales para tener en cuenta la conversión alimenticia que tiene el sistema”, aconsejó.
Asimismo, dijo que llevar un registro, te permite entender si vas por el camino correcto en la actividad o si en verdad hay que replantearse situaciones. “Es un sistema que llegó para quedarse. No solo en la categoría de engorde, también se está adoptando en gestación y maternidad con excelentes resultados”, concluyó.
Por Lucas Mich / EL ABC RURAL