Escribo estas líneas para comunicarles mi retiro y me permito hacer un repaso de mis años en esta empresa que fueron de la mano de su crecimiento. Desde Enero de 1972 – cuando comenzó mi carrera profesional en el sector – a Agosto de 2019, transcurrieron 47 años y 8 meses. De todo ese tiempo, 38 años y 6 meses los dediqué a trabajar en Suc. de Alfredo Williner S.A y Las TaperitasS.A
Desde el inicio, el desafío era cambiar un paradigma. Cuando llegué, el primer objetivo que teníamos era transformar la producción de cerdos de una actividad pensada sólo para consumir el suero de la industria lechera en una actividad agropecuaria sustentable. El trabajo fue mucho y arduo y poco a poco comenzamos a ver resultados positivos que lograron hacer crecer este proyecto.
Con los años, se abrieron las terminaciones de Bella Italia (1987), Arrufó y Suardi (1988) y El Trébol en 1998. En 1992 iniciamos una granja Intensiva y confinada de 330 madres. Tres años después trabajábamos con 800 madres, 1600 en 1998 y para el 2001 alcanzamos las 2000. Tras un trabajo incansable y superando obstáculos, en 2010 alcanzamos las 4000 madres.
Paralelamente, fui testigo y junto a compañeros y colegas, los encargados de cambiar el panorama del sector a nivel nacional ya que en aquel tiempo, a principios de los 80’s, la actividad porcina era secundaria en todo el país. Había que trabajar para preparar las bases de una actividad primaria y contar con instituciones que fortalecieran su desarrollo. Incluso crearlas. Así, la empresa se comprometió con el cambio y fuimos socios fundadores de GITEP, PORMAG y refundamos la AACC en AAPP.
Con estas instituciones comenzamos un trabajo para que la actividad porcina argentina sea competitiva en el mundo. Para esto, se gestionó y administró un acuerdo entre el sector privado y estatal para que el país fuera declarado libre de peste porcina. Logro que se obtuvo en 2005.
Es el momento para mí de comenzar una nueva etapa pero, como mi pasión por el sector sigue intacta, seguiré trabajando en mis proyectos personales. En cuanto a la empresa, mirando hacia atrás, los recuerdos se suceden y me enorgullece observar los logros y metas que hemos cumplido junto a todo un equipo de personas con las que trabajé y del cual estuve a cargo. Espero que este proyecto siga creciendo para cumplir todo su potencial y les dejo mis mejores deseos para que así sea.
Mi más sincero agradecimiento a los dueños, hoy inversionistas, directores presentes y ausentes y para todos los compañeros de trabajo de todos los niveles que me apoyaron y acompañaron en este desafío.

Raúl Lasorella
Gerente Area Porcinos