La actividad se desarrolló con el objetivo de profundizar la vinculación entre ambas instituciones y sus acciones orientadas al sector, para lo cual se abordaron diferentes problemáticas de la agricultura familiar en la zona.
En este contexto, se trabajó sobre experiencias regionales vinculadas a las producciones agroecológicas extensivas. Especialmente la vinculada al grupo ?Raíces del Sudoeste?, para la cual se planteó que se desarrollarán capacitaciones sobre sanidad animal, que estarán a cargo del SENASA. Además, se analizó la Unidad de Producción Agroecológica que funciona dentro de la Estación Experimental Agropecuaria Bordenave del INTA, a cargo de la ingeniera María Clara Mediavilla.
Por otra parte, se analizó la puesta en marcha de la ensachetadora pasteurizadora de leche desarrollada desde INTA y la Universidad de Buenos Aires (UBA). Una experiencia con impacto regional, ya que la localidad de Carhué es una de las 13 localidades seleccionadas por el Estado nacional para llevar adelante este proyecto.
La iniciativa promueve impactos sobre los ámbitos agrarios y urbanos, e identifica cuatro actores centrales: las familias productoras, los consumidores, las PyMes y los actores del Sistema de Ciencia y Técnica.
En este contexto, y considerando que el mercado informal de leche cruda llega a unos 3,8 millones de personas en nuestro país; con estos equipos se contribuye directamente a pasteurizar pequeñas cantidades, poniendo al alcance del sector la posibilidad de garantizar la inocuidad del alimento, con una leche segura y en un proceso directo del productor a la mesa.
Las experiencias del Periurbano bahiense en producciones avícolas y de cerdos, fundamentalmente, fueron analizadas por los técnicos participantes. La pesca artesanal, además, ocupó un lugar de preponderancia en el análisis de los profesionales; tanto por la magnitud de su desarrollo, como por el impacto que tiene en el comercio minorista y por las posibilidades de mejora del sector productivo.
De la reunión, realizada días pasados, participaron diversos profesionales de ambas entidades. En representación del Centro Regional Buenos Aires Sur de SENASA, estuvieron Adrián Cutini, veterinario de la oficina local Tornquist y Supervisor de Sanidad Animal de la zona; el médico veterinario Pablo Fregeneda, de la oficina local de Puan y del Equipo territorial de Agricultura Familiar participaron la referente regional Adela Surigaray y la veterinaria Lucía Marrero, de la oficina Benito Juárez.
Por su parte de INTA Bordenave participaron la ingeniera agrónoma María Clara Mediavilla, extensionista del partido de Puan, el abogado Edgardo González del Espacio Sociojurídico Territorial y referente regional de Comercialización del INTA, el ingeniero Pablo García, Agente de Proyecto del Programa Cambio Rural que trabaja en vinculación con la Agencia de Extensión que INTA Bordenave tiene en Bahía Blanca, mientras que por INTA Cesáreo Naredo lo hizo el ingeniero Emanuel Lageyre, Jefe de la Agencia de Extensión Rural Carhué (Adolfo Alsina).
Sobre el encuentro, Adela Surigaray manifestó: "La articulación con otras instituciones resulta uno de los componentes principales del Programa de Agricultura Familiar del SENASA, para poder conocer las demandas locales y diseñar estrategias sanitarias de intervención acordes a las realidades de los territorios. En este caso se logró avanzar en acuerdos que permitan mejorar la inclusión de los productores familiares en el RENSPA e intercambiar ejes de acción entorno a las problemáticas vinculadas a la sanidad animal, la pesca artesanal y los alimentos agroecológicos"
Emanuel Lageyre, perteneciente a INTA Cesáreo Naredo, expresó: "Estas mesas de trabajo articulado nos sirven para plantear problemáticas de la agricultura familiar y acordar acciones de trabajo conjunto, para favorecer los productores del territorio. Para la Agencia de Carhué es estratégico, dado que somos pocos agentes para un gran territorio en el que hay muchas problemáticas asociadas; por esto para nosotros es imprescindible generar estos espacios de acción conjunta"
Por su parte, Pablo Fregeneda y Adrián Cutini de SENASA aseguraron: "La articulación del SENASA a nivel local y el intercambio con organismos como INTA y otros sectores, posibilita la formalización de los pequeños productores de la agricultura familiar y el acceso a los programas sanitarios vigentes, con la finalidad de obtener animales sanos y producir alimentos inocuos, facilitando la comercialización de los mismos".
Pablo García, por otro lado, también se refirió al encuentro: "Es muy importante que las instituciones que acompañamos a los productores familiares y pescadores artesanales en la región (INTA – Programa Cambio Rural – SENASA), nos encontremos para acordar lineamientos y estrategias para mejorar la situación de las familias. Los procesos de formalización de la agricultura familiar son posibles, pero requieren normativas claras, trámites sencillos y buena voluntad de los agentes en el territorio".
Fuente: INTA
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