“Las vacunas dirigidas al sector porcino representan una gran protección para el sector productivo ya que la enfermedad respiratoria por Mycoplasma hyopneumoniae y el circovirus porcino tipo 2 producen retraso en el crecimiento. En el segundo caso, la muerte durante los primeros meses de vida del cerdo”, señalaron desde la dependencia.
Por su parte, la vacuna aviar está basada en herpesvirus (de pavo) genéticamente modificado, que actúa mediante la inoculación de pollos in ovo o al día de edad con el fin de producir una respuesta inmune para las tres enfermedades mencionadas.
Las autorizaciones respectivas se realizaron a través de la Subsecretaría de Producción Agropecuaria y Forestal, previa intervención de la Coordinación de Innovación y Biotecnología y la Comisión Nacional Asesora de Biotecnología Agropecuaria (Conabia), que determinaron que las modificaciones genéticas desarrolladas no representan riesgos para el agroecosistema.
Zoetis solicita y desarrolla
Según informa la propia empresa veterinaria en su web, “este producto ha demostrado ser efectivo para la vacunación de cerdos sanos de 3 días de edad o mayores contra el circovirus porcino (PCV2) y la enfermedad respiratoria ocasionada por M. hyopneumoniae. Se ha demostrado una inmunidad de 23 semanas de duración. Este producto contiene PCV2a y PCV2b, y ha demostrado ser efectivo contra la viremia ocasionada por PCV2, la excreción del virus en las heces, la colonización del tejido linfoide y la depleción linfocitaria”.
Con este aval de las autoridades que regulan los transgénicos en el país, se supone que ahora Zoetis tiene vía libre para comercializar esta vacuna en el país, aunque debería cumplir ahora su registro ante el Senasa.
La cadena de autorizaciones en materia de ONG debió activarse porque para la formulación de esta vacuna se utilizó un virus modificado, además de una bacteria no modificada: el virus quimérico recombinante cPCV1-2b y una bacterina de Mycoplasma hyopneumoniae no modificada genéticamente. Y “toda liberación al agroecosistema de Organismos Genéticamente Modificados (OGM) que no cuenten con aprobación comercial, requerirá en todos los casos autorización previa de la Secretaría de Agricultura”.
Fuente: Agricultura y Ganaderia Nación y Bichos de Campo